Iberdrola ha consolidado su papel como líder en la financiación de proyectos sostenibles con su última emisión de bonos verdes en libras esterlinas, una operación de 500 millones de libras (alrededor de 600 millones de euros) que supone su mayor colocación en esta divisa en los últimos 15 años. Este bono, con un plazo de 12 años y un atractivo cupón del 5,25%, fue recibido con una fuerte demanda, superando en cuatro veces la cantidad ofertada al atraer el interés de más de 140 inversores. Gracias a esta sobresuscripción, Iberdrola consiguió reducir el diferencial sobre el tipo de interés de referencia a 95 puntos básicos, muy por debajo de los 125 puntos iniciales, en lo que se considera uno de los mejores resultados del año.
La operación tiene como objetivo financiar futuros proyectos de energías renovables en el Reino Unido, país en el que Iberdrola mantiene una sólida presencia a través de su filial Scottish Power. Esta es la primera vez que la empresa emite bonos verdes en libras esterlinas, un paso que subraya su compromiso con la diversificación de fuentes de financiación y con el desarrollo de infraestructuras sostenibles.
La participación de bancos de primer nivel, como Barclays, HSBC, Goldman Sachs y NatWest, reafirma la relevancia de esta emisión en el mercado británico, un entorno cada vez más receptivo a las inversiones sostenibles. Este movimiento no es aislado, sino parte de una estrategia continua de Iberdrola para expandir sus recursos de financiamiento verde en distintos mercados internacionales. En lo que va del año, la compañía ha llevado a cabo un total de seis emisiones en diversas monedas, incluyendo una significativa emisión de deuda sénior de 2.150 millones de euros en septiembre, la mayor de su historia en ese segmento. Además, ha realizado operaciones en el mercado suizo y en Estados Unidos, acumulando una cartera sólida de deuda sostenible que le permite avanzar en su objetivo de liderar la transición energética global
Consolidación de Iberdrola en el mercado sostenible internacional
El rendimiento financiero de Iberdrola en 2024 ha sido igualmente destacado, con un beneficio neto de 5.471 millones de euros en los primeros nueve meses del año, lo que representa un incremento del 50% en comparación con el mismo periodo de 2023. Este crecimiento se ha visto impulsado por la venta de activos en México, que fortaleció su balance, y por un sólido desempeño en sus inversiones en infraestructuras energéticas renovables en Europa y América. La empresa espera cerrar el año con un crecimiento neto del 14%, excluyendo los efectos de la venta de activos, consolidando su posición en el mercado de energías limpias y sostenibles
Con esta emisión, Iberdrola refuerza su atractivo como referente en el ámbito de la inversión responsable. La emisión verde ha captado el interés de inversores comprometidos con los criterios ESG (ambientales, sociales y de gobierno), lo que demuestra la capacidad de la compañía para alinearse con las expectativas de sostenibilidad y rentabilidad de los mercados internacionales. La fortaleza de esta operación subraya no solo la estabilidad de Iberdrola como emisor, sino también su potencial para financiar a largo plazo un cambio hacia modelos energéticos bajos en carbono, en un momento en que el compromiso por la sostenibilidad es clave para el futuro de las grandes compañías energéticas.
Iberdrola continúa consolidándose como un modelo a seguir en el sector de las energías renovables, promoviendo activamente la inversión responsable y sostenible para alcanzar sus ambiciosos objetivos climáticos y de crecimiento en el Reino Unido y en el mundo.